Lectora de fantasía desde que conocí la biblioteca de mi liceo, y escritora desde que me enteré que J.K. Riwling era una mujer. Escribí mi primera novela a los 13 años, y mi primera saga de fantasía en mis años de bachiller.
Antes de conocer mi orientación sexual escribía historias de chicas que se querían, personajes diversos, y tramas que no iban sobre eso. Cuando me reconocí a mí misma como lesbiana fui a buscar eso mismo en los libros que leía, y ¡vaya estrago que me llevé cuando me di cuenta que no existía!
Durante años esperé al autora o autor que me diera la representación que yo buscaba y creía necesitar, pero eso nunca llegó. Así que en setiembre del 2017 volví a escribir, y comencé a planificar lo que se terminó convirtiendo en mi saga más extensa y en la que he volcado todo aquello que necesité en mis años de adolescencia, y lo que sigo necesitando diez años después.
A la saga Continente le han seguido más historias, ideas nuevas, y mundos que quiero conocer, pero todas parten de la misma meta: llenar las estanterías de lesbianas protagonistas.
Como apasionada a las rutinas y retos de escritura que soy, tengo historias que compartir para rato, pero como lectora obsesionada a las lecturas conjuntas puedes leerme agobiada en mis redes sociales.
Princess Romi 